El regreso triunfal de St. John’s gracias a Rick Pitino
La promesa de Rick Pitino en marzo de 2023 en el Madison Square Garden resonó en todo Nueva York, y el martes por la noche, el legendario entrenador cumplió su palabra. En un emocionante enfrentamiento entre los 12º clasificados Johnnies y los 11º clasificados Marquette, St. John’s emergió victorioso con un marcador final de 70-64.
Durante años, los fanáticos del baloncesto universitario en la Gran Manzana se habían acostumbrado a la decepción constante, a las derrotas inesperadas y a la búsqueda interminable de un éxito que los transportara de vuelta a los días dorados de la vieja Big East. Sin embargo, bajo el liderazgo de Pitino, la historia de la Johnnies está cambiando, y la emoción ha vuelto a Madison Square Garden.
Por primera vez desde 1986, el equipo ha ganado 15 de sus últimos 16 partidos y ha logrado un récord de 11-1 en la Big East, recordando a los fanáticos la época en que llegaron a la Final Four. Con una racha de 17 victorias consecutivas en casa, St. John’s está haciendo historia y reviviendo los días de gloria bajo el mando de Lou Carnesecca.
El partido del martes estuvo marcado por la intensidad y la defensa férrea de los Johnnies, que mantuvieron a Marquette a raya y limitaron sus opciones de tiro exterior. Kadary Richmond, nativo de Brooklyn, fue la estrella de la noche con 18 puntos, 11 rebotes y ocho asistencias, mientras que RJ Luis y Zuby Ejiofor contribuyeron con un juego sólido en ambos extremos de la cancha.
La victoria de St. John’s no solo demuestra su dominio en la cancha, sino también su resurgimiento como un contendiente serio en el baloncesto universitario. El próximo desafío será contra UConn, un enfrentamiento que promete mantener a los fanáticos al borde de sus asientos.
El trabajo de Rick Pitino no solo ha transformado al equipo, sino que también ha revitalizado la pasión de los fanáticos y ha devuelto la emoción al baloncesto universitario en Nueva York. Con cada victoria, los Johnnies están demostrando que han regresado para quedarse y competir al más alto nivel. La magia de Madison Square Garden ha vuelto a encenderse, recordándonos a todos que en el mundo del baloncesto, nunca se sabe qué sorpresas nos deparará el futuro.