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Los Miami Dolphins tuvieron la oportunidad de lograr una victoria importante en el Día de Acción de Gracias. En cambio, fue otra derrota difícil de digerir. Los Dolphins quedaron rezagados 24-3 al medio tiempo y finalmente cayeron 30-17 ante los Green Bay Packers, dejando su récord en 5-7 en la temporada. Green Bay produjo 389 yardas en ataque. El mariscal de campo Jordan Love completó 21 de 27 pases para 274 yardas y dos touchdowns. Josh Jacobs tuvo un touchdown por carrera, Jayden Reed anotó dos touchdowns recibiendo y el pateador Brandon McManus acertó los tres goles de campo que intentó, con un largo de 46 yardas. Miami produjo 345 yardas en ataque, pero la mayoría fue a través del juego aéreo. El mariscal de campo Tua Tagovailoa completó 32 de 40 pases para 330 yardas y dos touchdowns, pero fue capturado en cinco ocasiones.

Las críticas no se hicieron esperar en las redes sociales hacia Tagovailoa y los Dolphins por el lento comienzo y las dificultades continuas en climas fríos contra equipos de calidad. Algunos fanáticos expresaron su frustración por la falta de preparación y disciplina del equipo, así como por su incapacidad para competir contra equipos fuertes. A pesar del empuje al final, la desventaja en el medio tiempo resultó ser insuperable para Miami.

En el lado positivo, Green Bay mejoró su récord a 9-3 y se mantiene en una posición sólida para clasificar a los playoffs. Los Packers tendrán dos difíciles rivales divisionales en los Detroit Lions y los Minnesota Vikings, pero siguen luciendo como verdaderos contendientes en la NFC. Por otro lado, Miami no pudo mantener su racha de tres victorias consecutivas y perdió la oportunidad de acercarse en la AFC. Los Dolphins están dos juegos detrás de los Denver Broncos por el último puesto de comodín y necesitarán cerrar la temporada de manera sólida para lograr la remontada.

En resumen, los Dolphins enfrentan críticas por su desempeño en el partido ante los Packers, mientras que Green Bay sigue consolidándose como un equipo fuerte en la conferencia. La presión está sobre Miami para mejorar y competir en un cierre de temporada crucial.