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Título: Comparación entre ‘La Revuelta’ y ‘El Hormiguero’: David Broncano vs Pablo Motos

Hubiera sido interesante ver a Pedro Sánchez como primer invitado en La Revuelta. La elección de Mariano Rajoy o Carles Puigdemont habría sido polémica, considerando la supuesta presión ideológica que se dice que David Broncano ejerce en RTVE sobre El Hormiguero. La audiencia habría estado expectante, especialmente aquellos que se vieron saturados de Victoria Federica en Antena 3, que no se amedrentó ante la posible influencia de Moncloa. Con la imagen del rival presente y algunas pullas de por medio, cada bando sacó a relucir su artillería pesada. La elección de la Corporación fue sorprendente: el surfista ciego Aitor Francesena. ¿Suficiente para liderar la audiencia? No. Pero la sonrisa de Sánchez seguro que estuvo presente.

El campeón del mundo fue la carta de presentación de La Revuelta para competir en un prime time disputado con programas como El Hormiguero, El Intermedio, First Dates y Babylon Show. Cinco programas que se medirán en audiencia este martes a primera hora. No habrá sorpresas y Pablo Motos, con una amplia ventaja, se perfila como el ganador de la batalla televisiva más extrema en años. «Nací con glaucoma congénito. Una operación salió mal y perdí el ojo derecho. Cuando ya estaba controlada la tensión ocular, hace 12 años me caí de una ola tras un transplante de córnea y perdí el izquierdo», dijo Francesena, quien tuvo el honor de inaugurar un espacio que intentará atraer a los personajes más destacados de la competencia.

El Hormiguero se lanzó el 24 de septiembre de 2006 en Cuatro, donde permaneció hasta 2011, cuando Antena 3 adquirió los derechos. En total, lleva 19 años reinando de lunes a jueves gracias a perfiles de alto nivel como Will Smith, Paulina Rubio, Hugh Jackman, Elsa Pataky e Isabel Pantoja, que le otorgó su pico con 4.783.000 espectadores. La entrevista a Victoria Federica transcurrió sin sobresaltos. Quizás, la tensión pudo con Motos o la invitada no dio demasiado juego para los titulares. Sin embargo, seguramente complació a los seguidores de María Pombo, Tamara Falcó y sus seguidores. «Suelo soñar mucho con mis amigos. Me invento historias. Muchas veces me acuerdo, otras que no», contó.

Hay que reconocer el talento de Motos para atraer a tantas personas a la hora de la cena. Con sus altibajos ideológicos, ha logrado crear un show frenético y desordenado que, aunque a veces incoherente, ha sabido captar la atención del espectador promedio. Si algo bueno tiene su programa es que apenas hay que pensar: basta con mirar y aceptar. No hay fantasías ni alucinaciones, puro entretenimiento para las masas. Poca profundidad, demasiada forma. Por otro lado, la apuesta de RTVE, consciente del desafío que enfrenta, ha intentado bajar las expectativas. Saben que no ganarán, pero intentarán dejar una impresión duradera.

«Los surfistas, al igual que cuidamos el amor, también cuidamos a las personas que no pueden salir del mar. Sabemos cómo sacarlas. He ayudado a tres personas estando ciego», contó Francesena frente a un Broncano que afrontó la charla sin aspavientos. Estaba en su elemento: bromista, conversador, versátil… aunque, en ocasiones, tenso. Su omóplato dolía con solo verlo. Imaginen cómo estaría su estómago. Menos mal que, por ahora, el público no ha optado por llevar platos caseros como en Sálvame. De lo contrario, el estruendo habría sido mayor que la audiencia concentrada. Por lo demás, todo fue similar a La Resistencia: mismo teatro, mismo estilo, misma intención. Poco ha cambiado en comparación con el formato original.

Objetivo: competir

Heredero del proyecto que Movistar Plus+ convirtió en un sello distintivo, el reto ahora es hacerlo masivo. A pesar del impacto del espacio, estrenado en 2018, los resultados han sido modestos: su temporada más vista atrajo a 53.000 espectadores en promedio. Sin embargo, su éxito se gestó a través de las redes sociales y un grupo de colaboradores muy conocidos: Pantomima Full, Berto Romero, Candela Peña, Inés Hernand, Ignatius Farray… Algunos de los cuales siguen en esta nueva etapa junto a Ricardo Castella, Jorge Ponce y Marcos Martínez.

Durante los últimos meses, la idea de posicionar La Revuelta como contrapunto político de El Hormiguero, que es bastante crítico con el PSOE, ha acompañado a Broncano en todas sus intervenciones. ¿Será un catalizador del ideario de Sánchez, como han afirmado partidos y medios conservadores? «Decir que me ha puesto aquí como si fuese su sobrino y trabajara en una radio de pueblo es ridículo, ofensivo y mentira», señaló en el Festival de Vitoria durante su presentación. Su fichaje respondió al interés de José Pablo López, director de Contenidos Generales hasta el pasado 26 de marzo, por hacer de RTVE una cadena competitiva. Y, por qué no, abrirse a una juventud que hace tiempo le ha dado la espalda.

¿Y Telecinco?

No faltaron las típicas preguntas sobre sexo y dinero. Algunos dudaban de si Broncano, al pasar a la televisión pública, podría formularlas sin restricciones. Y, al parecer, o se lo permitieron o él simplemente las ignoró. Sobre todo, según El Mundo, teniendo en cuenta las tensiones entre el ente público y las productoras Encofrados Encofrasa y El Terrat. Mientras que una quiere intervenir en el formato, las otras piden libertad creativa total. Una disputa evidente cuando se trata de representar la diversidad de España y no solo la realidad de aquellos que hablan desde intereses partidistas.

¿Y Telecinco? Tras su reestructuración, con la repentina cancelación de Sálvame y la recuperación apresurada de Gran Hermano, la cadena principal de Mediaset ha estado estancada en un 8% diario. Un número muy lejano de aquellos años dorados en los que alcanzaba el 22%. Con los datos obtenidos por Babylon Show, no hay indicios de mejora. Sería sorprendente si Koke, Marcos Llorente y Enrique Cerezo, los protagonistas de anoche, le dieran el tercer lugar. Concluida La Revuelta, cabe preguntarse si Broncano, con su gran talento radiofónico, podría hacerle frente, aunque sea mínimamente, a Motos. El programa ha cumplido con las expectativas de los seguidores, pero debe considerar a un público mucho más amplio si quiere consolidarse. Tiene las herramientas para lograrlo.