Dan Hurley llegó a Madison Square Garden el miércoles, recién salido del set de «Good Morning America» en Times Square, mientras sus responsabilidades mediáticas continuaban a lo largo del día. Así es la vida en la cima del baloncesto universitario cuando eres el rey del deporte, habiendo ganado 12 juegos consecutivos del Torneo de la NCAA por un total de 260 puntos y dos campeonatos nacionales seguidos. Pero Hurley, luciendo un elegante traje gris con un corte de pelo fresco, zapatos de cuero negro y un par de calcetines que decían «Certified Pain in the Ass», no se estaba esquivando de lo que un grupo de docenas y docenas de reporteros deseaban saber: ¿Qué pasa con un triplete? «Es el elefante en la habitación», dijo Hurley sobre la hazaña, que solo John Wooden y sus legendarios equipos de UCLA lograron al ganar siete seguidos de 1967 a 1973. «No puedes esconderte de esta oportunidad. Si no ganamos tres seguidos, ¿qué van a decir las personas? ¿Que eres mal entrenador porque solo pudiste ganar dos seguidos? Pero entendemos la magnitud de esto. Tienes que ser un campeón en UConn para ser recordado y celebrado.»
Hurley está lejos de estar satisfecho con el éxito que su programa ha tenido en las últimas dos temporadas. De hecho, al escuchar a Hurley y sus jugadores hablar, queda claro que su enfoque al comenzar una nueva temporada solo se ha intensificado. «Si ha cambiado, se ha vuelto un poco más loco», dijo el base de los Huskies, Hassan Diarra, sobre Hurley. El compañero titular y selección previa al All-Big East, Alex Karaban, señaló que la intensidad de Hurley y su deseo de ganar han alcanzado un nuevo punto máximo esta temporada baja. «Hurley quiere otro campeonato con tanta ansia, pero nos está entrenando de la misma manera que siempre lo ha hecho», dijo Karaban. «La intensidad siempre ha estado allí. Ahora, simplemente se está intensificando».
En esta misma época la temporada pasada, los Huskies fueron seleccionados para terminar en tercer lugar en la Encuesta de Entrenadores Pretemporada de la Big East, detrás de Marquette y Creighton. El programa respondió al llegar a las coronas de la temporada regular y del torneo de la conferencia. Los entrenadores de la Big East no iban a cometer el mismo error dos años seguidos, ya que UConn fue seleccionado por unanimidad para terminar en primer lugar en la encuesta de este año, recibiendo los 10 posibles votos de primer lugar y 100 puntos de los entrenadores principales de la liga, a quienes no se les permitió votar por sus propios equipos. Podría ser fácil para Hurley dejarse llevar por toda la publicidad previa a la temporada. Pero en cambio, estaba preocupado por sus jugadores el miércoles, ya que estaba emocionado de que Karaban no fuera reconocido como un All-American de Pretemporada de la Associated Press. «Alex no hace un trabajo de mierda llamando la atención sobre sí mismo», dijo Hurley sobre su estrella junior, que ha desempeñado un papel clave en el récord de 68-11 de los Huskies en las últimas dos temporadas y será visto como el líder del equipo en este año.
Karaban planea usar su exclusión del equipo All-America de primera categoría como fuente de motivación. «Durante toda mi carrera, me han ignorado en todo», dijo Karaban, quien promedió 13.3 puntos y 5.1 rebotes por juego el año pasado. «Pero al mismo tiempo, quiero seguir demostrando a todos que están equivocados, y eso es lo que va a suceder este año». Esto encaja perfectamente con lo que Hurley se refiere como un hambre «patológica, enfermiza y obsesiva» por ganar un tercer título consecutivo. Pero Hurley no encontrará mucho material motivacional de otros programas de la Big East esta temporada, ya que el respeto mutuo entre los entrenadores por el programa de UConn no podría ser más alto.
Y como sus calcetines lo decían, Hurley disfruta dirigiendo un programa que ha sido un total «dolor en el trasero» para todos y cada uno de los oponentes de los Huskies en las últimas dos temporadas. Es por eso que Hurley está de regreso en Storrs, Connecticut por otro año, para embarcarse en la historia dorada.
