El Burnley clínico derrotó a Luton 4-1 en Kenilworth Road para mostrar su intención temprana de promoción en el Campeonato. El equipo de Scott Parker comenzó la temporada como segundos favoritos para ganar el título, detrás del Leeds, que comenzó su respectiva campaña con un empate 3-3 contra Portsmouth en un emocionante fin de semana de apertura.
El capitán Josh Brownhill disparó a los visitantes hacia una ventaja temprana mientras que Burnley optó astutamente por ir directamente al grano, evitando la presión de Luton, antes de que una rutina similar de balón largo permitiera a Wilson Odobert doblar su ventaja antes del descanso.
Tahith Chong levantó breves esperanzas de una remontada 10 minutos en el segundo período, solo para que los Clarets encontraran otra marcha, anotando dos goles más a través de la cabeza de Dara O’Shea y un gol de cierre enfático de Vitinho.
El joven equipo de Rob Edwards, que incluía a dos adolescentes, fue impotente para responder y podría haber concedido un quinto gol antes de que terminara la noche. «No voy a endulzarlo», reflexionó Edwards. «Tenemos que lidiar mejor con nuestras vulnerabilidades».
El entrenador del Burnley, Scott Parker, elogió el trabajo duro de su equipo y el plan de juego perfecto que ejecutaron. Destacó la importancia de mostrar una faceta diferente en ciertos momentos y elogió la capacidad de su equipo para adaptarse y ser letales en la transición.
Por otro lado, el entrenador de Luton, Rob Edwards, admitió las vulnerabilidades defensivas de su equipo y reconoció la necesidad de mejorar en las próximas semanas. A pesar de la derrota, se mostró optimista sobre el progreso futuro de su equipo y la incorporación de jugadores clave.
En resumen, la victoria del Burnley sobre Luton fue un claro indicador de sus ambiciones de promoción, mientras que Luton buscará corregir sus errores defensivos y fortalecer su juego en las próximas jornadas de la temporada.